Ayer, domingo 22 de Febrero de 2009, se inauguró el taller de novela en el Hotel Cristina de Algeciras. La sesión se dedicó a hacer una introducción a lo que va a ser el taller, que se prolongará hasta el mes de junio.
Invité a los alumnos a que se hicieran una reflexión: “¿Por qué quiero ser escritor?”. Si uno se está haciendo esta pregunta es que ya ha decidido serlo. Y si lo ha decidido se ha de ser consciente del cambio que esto implica en la propia vida personal de uno. Lo primero, meses de soledad frente al teclado de un ordenador, tiempo que se ha de robar a la familia, a los amigos y, en algunos casos al trabajo.
Después les indiqué que si uno escribe para uno mismo, no hay normas. Pero si uno escribe para ver publicada su obra, hay que ser más cuidadoso, no disponemos de tanta libertad y tenemos que ceñirnos a algún tipo de estructura, aunque en realidad, no hay tampoco un método concreto, cada escritor emplea el suyo. Lo cierto es que, independientemente de la técnica utilizada para escribir una novela, parece que todos los escritores nos ceñimos al Paradigma: Planteamiento, Nudo y Desenlace.
El Planteamiento dura desde días hasta meses y no forma parte de la escritura. Solamente estamos madurando una idea que nos invade en el trabajo, en un bar, en casa, hablando con unos amigos, etc. Es el tiempo en que estamos dando vueltas en la cabeza al tema central de nuestra novela. El proceso desemboca en la escritura de los primeros capítulos en los que vamos dando vida a los personajes principales y vamos dando los pasos necesarios para crear el conflicto.
El Nudo viene después del Planteamiento y es el proceso por medio del cual enganchamos al lector, que va a querer seguir leyendo si lo hemos hecho bien. Volviendo al Planteamiento, les decía yo a los alumnos, que yo soy partidario de los principios explosivos que causen en el lector una convulsión. No soy partidario de los inicios sosos o lentos. Por eso, siempre empiezo mis novelas con un asesinato, o un hecho biográfico traumático o una circunstancia que sea impactante y que entre directamente en el nudo como un misil. No es necesario crear todos los personajes ni todas las situaciones en el Planteamiento. El Nudo es el grueso de la novela y siempre es recomendable que algunos de los personajes vayan surgiendo como gotas en esta parte de la novela.
El Desenlace, a mi modo de ver, debe ser brutal. Me gusta que el lector diga: “Lo mejor es el final”. Si el final es soso, el lector leerá la novela, pero seguro que no leerá otra del mismo autor. Así que debemos ser muy cuidadosos a la hora de diseñar tanto el final como el principio.
Después, mandé un ejercicio para casa: Hacer una sinopsis de la novela que uno querría escribir en diez líneas. El objetivo es doble:
-Por una parte, el ejercicio pretende sintetizar el argumento en sólo diez líneas.
-Por otra, debemos ser capaces de hacer esta síntesis por lo siguiente: No se debe enviar un manuscrito no solicitado a un agente literario o a una editorial. Primero debemos redactar una carta de presentación de no más de medio folio, con elementos muy concretos que se detallarán según avance el curso pero en la que la sinopsis de la novela será la clave, porque son las líneas con las que vamos a enganchar al editor o al agente.
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lunes, 23 de febrero de 2009
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1 comentario:
Básicamente interesante, aunque se haya hablado más de eficacia (cómo llegar al lector/editor) que de calidad. Deben ser los tiempos que corren.
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