Poemario NO TARDES EN VOLVER A LA CRISTALERA DEL TIEMPO, de Virtudes Reza. EDITORIAL LEDORIA

Comprar el libro Editorial Ledoria, aquí

Comprar el libro en El Corte Inglés, aquí

Puntos de venta en librerías, aquí

El círculo alquímico, de Paco Gómez Escribano. Editorial Ledoria. I.S.B.N.: 978-84-95690-73-9. A la venta en enero.
Comprar libro en Estudio en escarlata, aquí.

Comprar libro en El Corte Inglés, aquí.


martes, 19 de julio de 2011

“El color de la maldad”, de Armando Rodera, por Paco Gómez

Conocí a Armando Rodera en el Círculo de Bellas Artes, en la presentación de “Sereno en el peligro”, de Lorenzo Silva. Me lo presentó un amigo común, Pedro de Paz. En las postrimerías del acto recuerdo que charlé con él y con su chica, Arantza. Conversé con más gente, pero esta pareja me cayó muy simpática. Entonces los dos éramos aspirantes a escritores, inéditos todavía. Pero ambos sabíamos ya lo que era escribir una novela y conocíamos la lucha que hay que tener con editoriales y agentes. Desde entonces, he coincidido con Armando y Arantza en multitud de actos culturales. Ambos son simpáticos, amables, buenos conversadores y ya, buenos amigos míos.

Yo no había leído nada de Armando, salvo las interesantes entradas en su blog. Con el tiempo a mí me publicaron, no la novela que tenía en ciernes, ya que ese proyecto no fructificó, sino mi segunda novela escrita, lo que son las cosas. Armando y Arantza acudieron a mi presentación. Y entre acto y acto cultural, en esos encuentros casuales, seguimos charlando de las vicisitudes de cada uno. Yo notaba que él empezaba a cansarse de cartas de rechazo, tanto de editoriales como de agencias. Y fui viviendo casi paso a paso su proceso interno, ese que hace que un escritor al final se hastíe y decida sacar su obra a la luz por su cuenta. Hoy en día, Internet nos ofrece esa vía.

Un día me escribió un correo y me dijo que si no me importaba leer un manuscrito suyo porque quería saber mi opinión como escritor que ya había publicado. Y yo que estoy todo el día leyendo, cómo me iba a importar leer otra novela, y más siendo la de un amigo. No voy a negar que sentí un poco de miedo porque podría darse el caso de que la novela no me gustara y tendría que decírselo, más que nada porque no tiene sentido engañar a un escritor amigo. No obstante, tenía muchas ganas de leer algo de él, con quien tantas cosas tengo en común. Solo tenía la referencia de Arantza, pero al fin y al cabo ella es su chica y, generalmente, las referencias de amigos y familiares no son las mejores porque suelen ser referencias poco objetivas. El caso es que me envió la novela por correo electrónico y la imprimí y la encuaderné, me gusta más el papel (qué le vamos a hacer). Y ya en las primeras páginas tuve la sensación de que tenía entre manos una novela excepcional que me enganchó desde las primeras páginas.

“El color de la maldad” es una novela negra en cuanto a que hay crímenes y hay una investigación. Pero se asemeja al trhiller americano moderno, adaptado eso sí a España. Armando se inventa un psicópata que comete crímenes basándose en la mitología griega y en el zodíaco. No me quiero ni imaginar todo lo que este hombre ha tenido que trabajar en aspectos de documentación, pues cuando describe esos crímenes parece un experto. Por otra parte, apuesto lo que sea a que también ha tenido que estudiarse las características y la patología de una mente enferma como la del asesino, pues consigue adentrase en su mente como pocos escritores.

La trama está perfectamente dibujada, así como las subtramas que, lejos de alejar al lector de la trama principal, enriquecen la novela y aportan datos para comprender toda la historia. Armando construye a los dos personajes principales, los investigadores, de manera original, y hace algo que pocos han hecho, excepto Lorenzo Silva y escasos escritores más: elegir como investigadores a dos componentes de las Fuerzas de Seguridad del Estado. Uno es el inspector Bermejo, de la Policía Nacional, y el otro es el sargento Pablo Roncero, un joven licenciado en Psicología perteneciente a la UCO, de la Guardia Civil. El primero cascarrabias y un poco pasado de vueltas por la edad y el segundo un joven al que todavía no le ha dado tiempo a quemarse por el oficio. Ni que decir tiene que los contrastes de la pareja es otro de los alicientes de la novela y un ejemplo de cómo personas que aparentemente no tienen nada que ver, acaban empatizando y llevando a buen puerto un objetivo, en este caso la resolución de los crímenes. Ambos se enfrentan juntos a la inteligencia del asesino y desde cada una de sus personalidades aportan datos para ir cercando al criminal. Hay otros dos personajes principales: la periodista Miriam Montfort y Jasón, el asesino. Jasón nos enseña la forma de pensar de un psicópata que se convierte en criminal y Miriam se ve involucrada en la historia desde el principio.

La novela es amena y nos cuenta una historia, sin descuidar el estilo. Y tiene los tres pilares básicos que debe tener una buena historia: planteamiento, nudo y desenlace, resueltos estupendamente por el autor.

Armando Rodera, quizá harto de lo que le decían editoriales y agencias, que no siempre aciertan con lo que publican y con lo que no publican, decidió poner la novela en Internet y, de momento, no le va nada mal. Se puede descargar en su webal módico precio de 2,99 euros, ya que no hay intermediarios. Y también la ha puesto en Amazon y en otros portales.

Si la novela es buena, como es el caso, y el precio es tan bajo, no os va a quedar más remedio que descargarla, ya que si no lo hacéis, os vais a perder una buena historia.

No hay comentarios: