Poemario NO TARDES EN VOLVER A LA CRISTALERA DEL TIEMPO, de Virtudes Reza. EDITORIAL LEDORIA

Comprar el libro Editorial Ledoria, aquí

Comprar el libro en El Corte Inglés, aquí

Puntos de venta en librerías, aquí

El círculo alquímico, de Paco Gómez Escribano. Editorial Ledoria. I.S.B.N.: 978-84-95690-73-9. A la venta en enero.
Comprar libro en Estudio en escarlata, aquí.

Comprar libro en El Corte Inglés, aquí.


viernes, 20 de marzo de 2009

Macabro, de Paco Gómez

Vi cómo te destruías lentamente en ritual macabro,
quise ayudarte, lo intenté hasta la extenuación,
mas no pude, no quisiste, no te dejaste, o no pudiste.
Acabé sin energía, por los suelos,
mis lágrimas se mezclaron con las tuyas,
y juntos, arrastramos la podredumbre por las calles.

Macabro fue el maldito protocolo,
ése que seguiste para destruirte,
para matarte, para acabarte.
Y macabra fue la forma en que me lo pusiste ante mis ojos.
Estabas tan bonita cuando empezaste el proceso...
El barrio, como dice la canción, no es ninguna pradera, ¿eh, amiga?

Estés donde estés, que sepas que me dejaste exánime.
Casi morí cuando tu cuerpo dio el último estertor de muerte,
cuando tu aroma se extinguió en la cutre habitación del maldito hospital,
y dejó paso al aroma de muerte, esperada, sí,
pero no por eso normalizada.
Tuviste que morir para matar mi alma.

Y desde entonces, estoy muerto en vida,
zombi en los paseos por el parque, en el bar,
en los paseos de alcohol, en los devaneos con lo malo,
ahora soy yo el que me destruyo,
y no hay nadie que me ayude a mí,
y no quiero que nadie me ayude.

Esta mañana me miré al espejo,
mi rostro va tomando el sendero de deterioro que tomó tu cara.
Moriste fea y enferma cuando eras la más bonita, la más cuerda.
Eras flor y esencias, y te transformaste en flores negras y en pestilencia.
Y yo no puedo evitar morirme, poco a poco, como tú, por ti,
No quiero seguir viviendo, no si no estás tú.

No soporto más tu ausencia, ni tu recuerdo,
bombardeando mi cabeza perdida en ti.
Tú, tú, tú, tú, tú, tú, tú, tú... ¡tú!
¡Macabro, maldito mundo macabro!
No soporto la indolencia de los que dijeron quererte,
no puedo verles sonreír y continuar con su vida, tan campantes.

Me muero, vida mía, en macabro protocolo de autodestrucción,
en homenaje a ti, pasaré por lo mismo hasta reunirme contigo,
quiero saber lo que pasaste y lo que pensaste,
y después me moriré en una habitación triste,
con aromas tristes, con sabores tristes, con palabras tristes,pero con la imagen de tu rostro en mis retinas, mi amor.

No hay comentarios: